26.estudio

Salgamos en la foto, un post para fotógrafos

“Mamá, por qué tu nunca estabas conmigo cuando era guagua”  fueron las palabras que a una buena amiga le dijo su niñita de dos años al ver que en ninguna foto de las que miraban estaba la mamá. Y su respuesta, lógicamente fue: “Yo te estaba sacando la foto

”Desde que mis niños entraron al jardín y colegio respectivamente me he visto en más de una ocasión buscando desesperadamente entre archivos antiguos para encontrar la “foto familiar” que piden en algún minuto. Y es que cuando además te dedicas a la fotografía, casa herrero cuchillo de palo, todos tienen esa foto menos tu. Y si eres una mamá que adora registrar cada momento de tu familia lo más probable es que te pase lo mismo. Porque nunca es un buen momento para salir en la foto. Es que estoy despeinada, tuve una noche tan mala que las ojeras me ocupan la mitad de la cara, voy a bajar 3 kilos y me pongo en la foto, y así suma y sigue. A todas las anteriores a mi se me suma “tu, que te ofreciste sacarme una foto, no sabes usar la cámara en modo manual así que mejor que no, mil gracias” Pero yo les garantizo que a la niñita de mi amiga le hubiera encantado ver a su mamá en las fotos, aunque fuera media desenfocada, ojerosa, mal peinada y con los 3 kilos extra. Porque lo que hoy nos molesta, mañana no nos va a importar para nada cuando veamos los lindos recuerdos que tenemos con los que más queremos. Así que, a pasar la cámara y cambiar de lado de vez en cuando. Y si no le confías la foto a nadie más entonces agarra un trípode, activa el temporizador y corre a la foto. Y bueno, si no te gusta ninguna de las alternativas anteriores, siempre está la selfie, pero de todo corazón espero que la selfie sea tu última alternativa (si, tengo rollos personales con la selfie) A mi por mi parte, todavía me falta otro ítem para lograr todas las fotos familiares que quisiera, lograr que el marido coopere con la causa, pero ese es tema en si mismo da para otro post.